El da Vinci Xi (IS4000) es actualmente la plataforma más evolucionada destinada a la cirugía mínimamente invasiva. Su tecnología innovadora y precisa dota a este sistema robótico de adaptabilidad y versatilidad para diferentes especialidades: desde la urología a la cirugía general, tanto como la ginecología, la cirugía torácica, la cirugía cardíaca, la cirugía pediátrica y la otorrinolaringología.
Los componentes que constituyen el sistema da Vinci Xi son tres: una consola quirúrgica, un carro para el paciente y finalmente un carro de visión.
El cirujano trabaja con los ojos, las manos y el campo perfectamente alineados, y controlados desde la consola. La visión detallada, los movimientos a escala de las manos del cirujano, la posibilidad de pasar de una vista del campo completo a un modo de múltiples imágenes (se pueden introducir hasta dos imágenes auxiliares que se muestran junto con la visión del campo quirúrgico), hacen que las maniobras del cirujano sean más seguras, precisas y firmes.
Junto con el cirujano en la consola trabaja siempre un asistente, que se sitúa junto al carro del paciente en el campo estéril, encargándose de la sustitución de los instrumentos y del endoscopio, y que durante la fase pre-operatoria tiene la posibilidad de seleccionar, a través de una pantalla táctil que se encuentra en la parte posterior del carro, el tipo de intervención que se va a realizar. Dependiendo del tipo de intervención el sistema colocará los brazos robóticos en una posición o en otra.
La colocación de los brazos se puede realizar también de forma manual: desde la pantalla táctil de carro de paciente se puede variar la altura y la rotación de la estructura en que están montados los brazos del robot.
El carro quirúrgico cuenta con un puntero láser situado en el centro de la estructura de los brazos, que facilita la colocación de los mismos en el campo quirúrgico.
La cuarta generación del sistema da Vinci, el da Vinci Xi (IS4000), permite entre otras cosas: